C.E.E. Miguel de Cervantes
C.E.E
MIGUEL DE
CERVANTES
Arquitecto
Angel Rodriguez Martinez-Conde
Ubicación
Elda, Alicante
Proyecto
Año 2008
Superficie construida
5000m2
Este proyecto invitó a reflexionar sobre la necesidad de transmitir por medio de la arquitectura sensaciones de protección y recogimiento en un planteamiento introspectivo, llevando la luz y la naturaleza hacia el interior del edificio.
Con un programa muy colmatado, la intención desde el inicio fue tomar aquellas decisiones que nos llevaran a reducir la densidad edificatoria de la parcela al considerar el Centro como un organismo vivo, donde es muy importante la posibilidad de crecimiento y para ello debimos disponer de grandes áreas vacantes que mientras no se produzcan ampliaciones servirán como espacios de expansión y juegos.
En este diagrama, la pieza principal de la edificación es la destinada a rehabilitación, una gran plaza cubierta donde se alojan las áreas de tratamiento (rehabilitación, psicomotricidad, hidroterapia, junto con los vestuarios), y que se transforma en el corazón de toda la composición. Este conjunto de formas circulares posee elementos fácilmente reconocibles gracias al color, la iluminación y su textura particular. Los cilindros tienen la capacidad, desde el interior, de controlar el espacio sin ángulos muertos y en el exterior de invitar al recorrido. Nos orientan a través de los sentidos y nos dan una referencia clara dentro del gran espacio que los alberga.
Están enlazados por una doble piel de policarbonato, que matiza y vela el color, y que genera un nuevo volumen integrador, de carácter suave y orgánico además de recorrible en todo su perímetro. Los cilindros, de forma individual, penetran la cubierta y se manifiestan levemente al exterior caracterizados por sus “tapas” inclinadas de forma aleatoria y que en los principales, rehabilitación e hidroterapia, se convierten en lucernarios de día y linternas de noche, permitiendo visualizar el cielo, importante sobretodo en la estancia de hidroterapia, donde el tratamiento se realiza casi siempre con la mirada del alumno hacia arriba. Esta zona de la cubierta queda enlazada con la planta baja por medio de una rampa, de tal forma que se convierte en la única azotea transitable, en este afán de lograr espacios exteriores de recreo o paseo, y enfatizando además la idea de pieza principal al poderse recorrer en situaciones antagónicas, arriba y abajo; adentro y afuera.
La idea de patios que sirven de expansión, iluminación y ventilación a las aulas, es repetida para el resto de áreas docentes del programa, y se encuentran situadas en la zona más privada de la parcela configurando una especie de peine, lleno/vacío, entre las aulas y las expansiones. Estos espacios abiertos están orientados a Este, de tal forma que las aulas reciben luz de mañana y no, la molesta y calurosa luz de oeste, excepto las aulas de ciclo C, orientadas a Oeste pero con una marquesina protectora del sol. Estas aulas aprovecharán los espacios destinados a ampliación del centro como área de esparcimiento entendiendo que en algunos casos estarán dotados de una mayor autonomía y necesitan mas espacio de descompresión.
El núcleo formado por las aulas de ciclo B y C queda rematado por una batería de talleres, orientados a sur frente a la pista deportiva y a la huerta, elementos exteriores del programa, que terminan de cerrar el conjunto y dialogan con el parque existente, en cierto modo integrándose a él.