Para ello se plantean una serie de actuaciones como la utilización de una estructura prefabricada de hormigón que permite salvar luces mayores (de hasta 9,60 m) con menor canto, lo que permite a su vez liberar en mayor medida la planta al tener menos soportes y absorber sin problemas distintas distribuciones, o liberar de recorridos de instalaciones y elementos de las mismas, tanto las particiones interiores como el intrados del cerramiento exterior (calefacción por suelo radiante, bandejas eléctricas, datos y fontanería en falsos techos de zonas comunes, núcleos húmedos en la misma posición en las distintas plantas). Otras actuaciones como agrupar de manera adyacente dependencias de carácter análogo, como el salón de usos múltiples y el comedor, o la sala de profesores y el disponible, contribuyen a dotar al edificio de esa flexibilidad programática en el tiempo que se busca.

Tanto la estructura como los cerramientos son prefabricados de hormigón, con lo que se consigue por un lado un ahorro en plazo de ejecución de dos meses y un ahorro económico del 27% en el cerramiento, al cumplir sobradamente el panel utilizado (5 cm de hormigón + 10 cm de aislante térmico + 5 cm de hormigón) los criterios marcados por el CTE en niveles de transmitancia térmica, superando incluso los del cerramiento tradicional de ladrillo, aislante, cámara y trasdosado, con un ahorro importante en coste.